
Llamado de unidad en torno a la Guelaguetza. Eduardo Rojas Zavaleta.

Ayer, en mi calidad de presidente de la Comisión de Turismo de esta Legislatura me contactaron hoteleros y restauranteros. Hoy, de camino a este Congreso platicaba con el taxista, y todos coincidieron alarmados en una preocupación: los constantes bloqueos que
amenazan la temporada más esperada por los prestadores de servicios.
Por eso, desde esta tribuna hago un llamado a la unidad en torno a la Guelaguetza como la celebración que manifiesta el folclore de los
oaxaqueños, que refleja sus costumbres, vestimenta y gastronomía; es, por mucho, la fiesta más grande de los pueblos originarios de nuestro país.
Para que los grupos políticos, sociales o de cualquier índole dejen de lado el interés personal, para que cesen los bloqueos y con ello protejamos la fiesta de todos.
Porque además de tratarse de una tradición que nos hermana, es un ente que deja recursos para todos: restauranteros, prestadores de servicios, taxistas, comerciantes; que trae beneficios económicos tangibles para el sustento de las familias.
Que no se nos olvide, los efectos de nuestra Guelaguetza no se limitan al mes de julio, se replican durante todo el año captando el interés de los paseantes que eligen a Oaxaca como su destino predilecto.
Sin rodeos, nuestra máxima festividad deja beneficios económicos palpables para todas y todos los oaxaqueños.
En el pasado, fueron la grana cochinilla y el café los que hicieron posible el desarrollo económico de nuestro estado. Hoy estamos a
las puertas de una tercera oportunidad, el turismo; no trunquemos nuestro futuro, fortalezcamos a Oaxaca.
Señoras y señores, no permitamos que las diferencias de pensamiento, que enriquecen el debate político, que nos hacen fuertes, derriben nuestro anhelo de unidad y a través de su unidad poder aspirar a un mejor mañana.
Si estamos unidos, nada ni nadie nos podrá detener. Si permanecemos básicamente unidos, habremos de atender nuestras
necesidades en términos de generación de empleos y obtención de ingresos para las familias, ¡porque el turismo deja derrama
económica!
Yo los convoco a que hablemos bien de Oaxaca, con buenas palabras y mejores acciones recibamos al turismo con los brazos
abiertos, seamos todos anfitriones de la máxima fiesta de los oaxaqueños.
Es por nosotros, es por nuestro estado, es por hacer grande lo que nos hace únicos ante los ojos del mundo, la Guelaguetza.
Es por Oaxaca, y por Oaxaca todo.